7 mitos falsos sobre Machu Picchu

Muchas veces el nacionalismo extremo o la rivalidad hacia algún país, alimenta leyendas urbanas y mitos sobre algún tema que no son del todo ciertos. Muchos de estos mitos nos llegan incluso a convencer de ciertas realidades que no lo son tanto. En este caso, daremos a conocer 7 mitos falsos sobre Machu Picchu.

1Chile administra Machu Picchu

Existe una creencia generalizada en los peruanos acerca de que la administración de Machu Picchu está en manos chilenas, lo cual es totalmente falso, pues la ciudadela se encuentra administrada por la Dirección Desconcentrada de Cultura del Cusco, adjunto al Ministerio de Cultura, es decir que el Estado peruano administra y es dueño absoluto del Parque Arqueológico de Machu Picchu.

2Hiram Bingham descubrió Machu Picchu

Hiram Bingham fue el descubridor científico de Machu Picchu, mas no el descubridor absoluto, pues no existe tal, ya que antes de la llegada del arqueólogo estadounidense, las personas y habitantes del lugar conocían la ciudadela. El mérito de Bingham reside en haber sido el primero en estudiar Machu Picchu de manera científica.

3La empresa PeruRail es administrada por chilenos

Esta empresa ofrece un servicio de transporte hacia Machu Picchu y se dice que es administrada por capitales chilenos, afirmación que no se ajusta a la verdad. Lo cierto es que está administrada por extranjeros, pero estos no son chilenos. La empresa antiguamente se llamaba ENAFER (Empresa Nacional de Ferrocarriles del Perú), pero fue privatizada por el presidente Fujimori convirtiéndose en PeruRail, la que fua adquirida por la empresa británica Belmont, la misma que formó un consorcio con los capitales peruanos. Posteriormente fue vendida a los franceses por lo que actualmente se encuentra administrada por este país europeo. Sin embargo, tampoco se trata de un monoplio, pues PeruRail compite en el rubro con Inca Rail.

4Machu Picchu es una ciudadela

Machu Picchu no es una ciudadela, ni una ruina y tampoco una fortaleza. No es una ruina porque no se encuentra en este estado, teniendo en cuenta que este lugar nunca fue hallado por los españoles, razón por la que no fue destruido. Los términos fortaleza y ciudadela hacen referencia a un lugar para uso militar, lo que no fue Machu Picchu. Entonces, ¿cómo podría calificarse a Machu Picchu? Si apelamos al idioma quechua, podríamos utilizar la palabra “llaqta” que se traduce como pueblo o ciudad. El nombre de Parque Arqueológico de Machu Picchu sería el nombre ideal para referirse a la llaqta.

5La empresa de buses que presta servicios hacia Machu Picchu es chilena

La empresa de buses que presta el servicio de transporte desde el pueblo de Machu Picchu hacia el Parque Arqueológico del mismo nombre se llama Consettur y no es chilena, ni le pertenece a una sola persona. Los buses de esta empresa utilizan las pistas de la carretera Hiram Bingham, que le pertenecen al Estado, motivo por el cual tuvo que presentarse a una licitación, la cual ganó y la obtuvo por 10 años, tiempo que a la actualidad ya se encuentra vencido. La empresa Consettur esta conformada por capitales peruanos de personas que viven por los alrededores de Machu Picchu, es decir que pertenece a pobladores y comuneros del lugar. Tiene 60 accionistas mayoritarios y 200 accionistas minoritarios. Es una empresa bastante rentable teniendo en cuenta que tiene más de 20 años operando.

6Machu Picchu fue construido por extraterrestres

No existe evidencia alguna de que Machu Picchu haya sido construida por entes distintos a los incas. Estas hipótesis solo contribuyen a menospreciar la capacidad de los antepasados peruanos. Incluso se llegó a afirmar que los incas nunca conocieron Machu Picchu. Existen evidencias científicas bien fundamentadas que sostienen que las grandes rocas fueron llevadas hasta las alturas gracias a grandes troncos, los cuales eran sostenidos por sogas, utilizando una gran cantidad de hombres para su transporte.

7Los terrenos de Machu Picchu les pertenecen a dos familias

Hace pocos años, dos familias aseguraron ser las dueñas, con documentos en mano, de los terrenos sobre los que se levanta el Parque Arqueológico de Machu Picchu. Una de estas familias estuvo representada por Roxana Abril y la otra por Blanca Zavaleta y sus hermanos. Ambas familias se disputaban la propiedad de Machu Picchu. La explicación a esta disputa se encuentra en el año de 1904, cuando don Mariano Ignacio Ferro compró 22.000 hectáreas alrededor de Machu Picchu, incluido el lugar donde está el santuario. Fue Ferro quien ayudó a Hiram Bingham a llegar hasta el lugar. Estos terrenos le fueron dejados como herencia a la bisnieta de Ferro, Roxana Abril, pero en 1940, esta familia vende el 80% de las hectáreas a la familia Zavaleta; razón por la que estas dos familias se enfrentaron contra el Estado peruano para obtener la tenencia legal de Machu Picchu. El Estado basó su defensa en la ley de 1929 que estipula que cualquier vestigio arqueológico encontrado en algún terreno privado le pertenece automáticamente al Estado peruano. Los juicios se iniciaron en 2003 y culminaron en 2019 dándole la razón al Estado.